Surfear olas grandes es muy exigente. Esta actividad requiere de una preparación específica y una técnica de respiración que permita evitar el riesgo que los surfistas puedan experimentar debido a la limitación respiratoria a la que se exponen cuando se sumergen en el mar.
Una ola grande, que puede medir desde los 6 metros de altura o más, produce que el surfista se encuentre bajo el agua durante un periodo de entre 10 segundos a 1 minuto aproximadamente. Sumado a esto, el esfuerzo del surfista para remar la ola y los constantes cuerpos de agua que lo impactan, puede provocar que el aire de los pulmones se reduzca demasiado.
En el surf, la apnea es una técnica muy importante. Este entrenamiento es una preparación psicológica y metabólica que permite una mejor adaptación por parte del organismo para mejorar el rendimiento deportivo.
La apnea consta de 4 partes que se integran a lo largo de un entrenamiento constante:
Desarrollo de la autoconsciencia respiratoria.
Desarrollo de la flexibilidad, coordinación y resistencia del aparato respiratorio.
Desarrollo de la capacidad anaeróbica y la tolerancia a la asfixia, tanto fisiológica como psicológica, mediante el entrenamiento de apnea general en seco y en agua.
Desarrollo de la capacidad de apnea en agua durante situaciones de estrés y durante esfuerzos específicos a ritmos específicos, mediante el entrenamiento de apnea.
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